El consejo de Bankia ha solicitado una ayuda pública de 19.000 millones de euros, una cifra récord en la historia financiera de España, incluso sin considerar que el conjunto del rescate ascendería a 24.000 millones. Para situarnos: más dinero del que se ingresa en todo el año por el impuesto de sociedades. En definitiva, una cifra descabellada para la dimensión económica de España. Es tal su dimensión que ni siquiera se sabe cómo puede financiarse semejante operación, aunque todo parece indicar que tendrá que echarse mano de Europa, donde no es de extrañar que Rajoy y Rubalcaba hayan decidido tener una voz única.

A todo esto, ¿por qué el establishment no quiere investigar a Bankia? Lo que para cualquier ciudadano parece evidente –ábrase de inmediato una comisión de investigación del Congreso sobre Bankia-, resulta que apenas interesa a la clase política. El pretexto fácil es no contribuir a desestabilizar más el sistema financiero, pero hay más razones: es el banco del Partido Popular, como resultado de la fusión de dos grandes cajas del PP, Cajamadrid y Bancaja, donde mandaron Miguel Blesa, amigo de Aznar, y José Luis Olivas, ex presidente de la Generalitat valenciana, a quienes, de la mano de Rajoy, sucedió el ex ministro Rodrigo Rato, ya como presidente de la resultante Bankia. Pero tampoco hay entusiasmo con la investigación en el PSOE, que limita su propuesta a la Asamblea de Madrid. En realidad, la izquierda (PSOE, IU, sindicatos…) también ha tenido puestos en los consejos de las entidades que serían objeto de investigación y si bien su papel no fue tan relevante como el del PP sí formó parte del proceso de catástrofe, que por si fuera poco fue objeto de regulación por parte del Gobierno deZapatero. Los partidos que tienen las manos libres o bien miran para otro lado –CiU y PNV- o sí apoyan la investigación –ERC, UPyD, BNG…- pero sin suficientes diputados en el Congreso para lograrlo.

¿Y el auditor externo? ¿Tampoco se enteró de nada, una vez más? ¿Se limitó a cobrar una buena minuta? Se trata de Deloitte –lleva dentro la antigua Arthur Andersen- y sus responsabilidades alcanzan no solo a Cajamadrid, sino también a Bancaja y al Banco de Valencia. ¿Y Goirigolzarri? De momento ya sabemos que no ha venido a depurar responsabilidades… Sin comentarios. @J_L_Gomez

>OTR 26-05-12