Buscar
sábado, 04 de mayo de 2024 21:02h.
Opiniones

El poder municipal del PSOE ante el 22-M

La alcaldía de Barcelona, por la que han ido desfilando Narcís Serra, Pasqual Maragall, Joan Clos y Jordi Hereu, es el principal referente del poder municipal socialista en España, ya que la de Madrid hace ya mucho que se la cedió al PP, tras aquellos años tan especiales de Tierno Galván, cuya gloria heredó

La alcaldía de Barcelona, por la que han ido desfilando Narcís Serra, Pasqual Maragall, Joan Clos y Jordi Hereu, es el principal referente del poder municipal socialista en España, ya que la de Madrid hace ya mucho que se la cedió al PP, tras aquellos años tan especiales de Tierno Galván, cuya gloria heredó durante un tiempo Juan Barranco. En Barcelona no hay riesgo de que se la arrebate el PP, sino CiU, pero de todos modos su pérdida no tendría precedentes en la democracia posterior a la dictadura franquista. Finalmente, el candidato socialista en Barcelona será el actual alcalde Jordi Hereu, cuya victoria en las primarias frente a Montserrat Tura no ha sido abrumadora pero sí clara, en contra, por cierto, de lo que habían indicado las encuestas.

Jordi Hereu no tiene el peso ni el carisma personal de Serra o Maragall, sufre el desgaste del PSC y su gestión ha sido muy contestada, pero aún así aflora una tenacidad que avala su candidatura frente a la del nacionalista Xavier Trias, el hombre llamado por CiU para conquistar por primera vez la alcaldía barcelonesa. Hereu ya ha derrotado a las encuestas en las primarias y aspira a repetir la faena el próximo 22 de mayo, una cita que los sondeos decantan a favor del candidato de Artur Mas. Como dice El Periódico de Catalunya, diario progresista próximo al PSC, Jordi Hereu ha demostrado coraje y fe en sí mismo, dos cualidades políticas no despreciables. Ahora, una vez despejada la incógnita del candidato, la duda se centra en si Hereu llevará a Tura como número dos, lo cual sería una forma de aunar fuerzas en un momento más que delicado para el PSC y, por extensión, para el PSOE.

Los socialistas tendrían que centrar en Zaragoza su atención si pierden Barcelona, dadas sus remotas posibilidades de recuperar Madrid y las dificultades de gobernar Valencia, Sevilla y Málaga, que al igual que la capital parecen decantarse por el PP, según pronostican las encuestas. Bilbao, la otra gran ciudad española, también parece tener otro dueño, en su caso el PNV.

Entre unas cosas y otras, al PSdeG-PSOE no le van tan mal las cosas. De hecho, la noche electoral del 22-M puede arrojar más luces en rojo que en azul sobre el mapa electoral de la Galicia urbana, gracias a las coaliciones PSOE-BNG. Es más, si los socialistas pinchan en todas las grandes ciudades de España, que no es nada improbable, Vigo y A Coruña, donde sí parece posible que sigan gobernando Abel Caballero y Javier Losada, se convertirían no solo en referentes de los socialistas gallegos, sino también españoles.

La presencia del BNG, que parece mantener su posición, y la resistencia del PSdeG-PSOE en las grandes ciudades gallegas revelan que la derrota del bipartito en 2009 fue producto de unas circunstancias muy especiales, que entre Emilio Pérez Touriño y los historiadores terminaremos conociendo mejor, pero que están lejos de ser extrapoladas a las municipales de mayo, por mucho que se empeñen Alberto Núñez Feijóo y Alfonso Rueda. El PP de Galicia es la primera fuerza de esta comunidad y lo seguirá siendo tras las municipales, sin que eso suponga que no haya una alternativa de gobierno con los votos de progresistas, galleguistas y nacionalistas, que la hay.